No es un sueño, ocurrió de verdad. La selección española femenina logró su billete a París 2024 tras completar un Preolímpico brillante, impoluto, que se resolvió de la manera más inverosímil posible: con una canasta de Gracia Alonso, de espaldas al aro, a falta de 4 décimas para que el cronómetro de la pista central de Debrecen decretase el período de prórroga.
El combinado español, formado por Sandra Ygueravide, Juana Camilión, Gracia Alonso de Armiño y Vega Gimeno, estuvieron impecables durante todo el fin de semana, logrando 5 victorias en 5 partidos disputados. Gracias a ese pleno de victorias, no hizo falta recurrir a la segunda opción para poder estar en los Juegos, que residía en el partido por el tercer puesto y que habría supuesto un extra de esfuerzo y tensión para el conjunto español.
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Torneo impecable de las españolas
España comenzó el torneo el viernes de la mejor manera posible. Dos victorias contundentes ante Mongolia (21-7) y Japón (21-12), con una solidez defensiva tremenda en ambos encuentros, colocaban directamente a las jugadoras de Ana Junyer en cuartos de final, a falta de un encuentro de la fase de grupos por disputar. También contó por victoria la selección ese tercer encuentro ante Egipto (22-5), donde a la fortaleza mostrada atrás el viernes, el cuarteto español le añadió una fluidez en ataque excepcional, que comenzaba a hacer creer que el sueño de París era muy posible.
En cuartos de final esperaba Polonia, rival de entidad, pero que también acabó sucumbiendo ante el empuje de las españolas. Logró sobreponerse España a la agresividad polaca en defensa con un trabajo muy coral en ataque para ponerse 7 arriba (18-11) a falta de dos minutos para el final. Tras dos canastas de Polonia, Vega Gimeno terminó de abrochar el triunfo con un tiro de dos y un lanzamiento desde la línea de tiros libres.
El milagro de Gracia Alonso
El momento de la verdad para España llegó con las semifinales, donde a pesar de jugar con red por la posibilidad de jugar el partido por el tercer puesto, las españolas lo pusieron todo sobre la mesa para asegurar el billete a París. Salieron en tromba las españolas abrasando a Canadá de inicio (6-0), pero el escaso acierto exterior y la potencia en el rebote de las canadienses fueron cerrando la brecha inicial para colocar el partido en el alambre (16-15) a falta de 2:07 para el final. Entonces, llegó el momento mágico para España. Puso las tablas por primera vez desde el inicio Canadá con una canasta de Plouffe (18-18) y restaban 10 segundos en el reloj. Recibió Gracia Alonso en el codo de la zona y se levantó buscando el game winner pero erró su lanzamiento, y en un acto de fe inquebrantable, peleó el rebote con dos jugadoras canadienses que tenían, en un principio, ventaja por tamaño y posición. Con todo, Gracia palmeó el rebote y ella misma agarró su propio rechace, para, sin tiempo para girarse, lanzar de espaldas al aro, y anotar la que puede ser la canasta del año del baloncesto español.
Sin suerte para los chicos a pesar de su gran Preolímpico
La selección masculina, por desgracia, no logró obtener la clasificación, a pesar del gran nivel mostrado por el cuarteto dirigido por Pedro Meléndez. Tras un inicio dubitativo, con derrota incluida ante Canadá, España se impuso a Francia y Egipto, logrando el billete para los cuartos de final. Allí esperaba uno de los rivales más potentes del torneo, Lituania, que no dio opción al conjunto español (9-21).
